Después de hacer la ferrata y comer, cogimos el coche y a toda prisa nos fuimos a Torla con el coche y dejamos el coche en un aparcamiento habilitado al principio del pueblo y cogimos un bus que nos dejó en el aparcamiento en el comienzo del valle de Ordesa.
Eran las 19:00 y según la información que teníamos se tardaba 3 horas y media, así que teníamos que darnos prisa para que no se nos hiciera de noche. Cargados con sacos, comida y la tienda nos pusimos a caminar hacia la Cola de Caballo situada al final del valle. Una pena las prisas, pues no pudimos disfrutar como se merece del valle y de los múltiples cascadas que el río Arazas deja en su paso por el valle. Ordesa es un valle espectacular, encerrado entre las dos fajas, rodeado de un bosque de hayas, cascadas... lo que le pierde un poco es la multitud de gente que te encuentras al cruzarlo, pero la sencillez de la ruta y lo espectacular del valle hace que sea seguramente el punto más concurrido de los Pirineos.
El camino es amplio y bien señalado hasta llegar a la cascada de La Cola de Caballo que se nos sorprende al final del valle. Seguimos siempre la ruta GR11 marcada con franjas roja y blanca. Llegada a este punto, llevábamos andando 1 hora y media, un gran ritmo, pero veíamos que la noche se metía y además el cielo tronaba y empezaba a llover!!. Nuestra idea era remontar rápidamente el valle por las clavijas de Goriz, que se encuentra justo siguiendo el camino, pero se puso a llover tanto que nos dio miedo enfrentarnos a ellas, y decidimos continuar el sendero que con marcas del GR11 nos llevaba al mismo punto que las clavijas pero subiendo de forma más sencilla y lenta. Este sendero está marcado con un cartel y se toma a la derecha del camino que nos ha llevado a los pies de la Cola de Caballo, tras cruzar el río por un puente.
Una vez superado la muralla que cierra el valle el sendero continúa subiendo pero de forma más tendida en dirección norte hasta llegar al refugio. Eran las 9:30, y el tiempo estaba enrarecido, pusimos la tienda dejamos las mochilas en el refugio y nos tomamos una caña y comimos los bocatas que llevábamos.
A las 23:00 salimos del refugio y nos fuimos a la tienda. La noche se nos hizo muy muy larga, estábamos 3 personas en una tienda de dos y fuera diluviaba....así que nos mojamos hasta los calzoncillos.
A partir de las 4:30 el tiempo nos dio un descanso y dejó de llover. A las 6:00 nos pusimos en pie, desayunamos y con mucho sueño abordamos la subida al Monte Perdido.
El primer tramo de la ascensión es una pindia pero sencilla senda jalonada de hitos y muy pisada que supera la loma situada al norte del refugio. Llegamos a un murallón de piedra denominado Las Escaleras que rodeamos por la izquierda siguiendo la senda con alguna sencilla trepada, hasta llegar al Ibón helado a casi 3000 metros. Empieza la parte más complicada, el camino se ve claramente desde el punto que nos encontramos, tenemos que girar a la derecha (este). El primer tramo lo hacemos por las rocas a la derecha del canal para evitar la nieve que todavía perdura del duro invierno. Cruzamos el nevero y nos enfrentamos a la temida escupidera. Se trata de un sendero muy pindio que trascurre por un canchal, dificil de afrontar pues cada paso hacia arriba supone un resbalón hacia abajo. Por suerte es un tramo corto y en 30 minutos o un poco más estamos en el pico!!!.
Las vistas son escepcionales, que maravilla de sitio. Al sur vemos claramente los tres valles,el del valle del rio Vellos y el de la Pineta, el resto de vistas, picos y más picos. Vaya espectáculo!!.
Subimos en 3 horas y media, ahora "sólo" quedaba una bajada de 1900 metros de desnivel. La bajada de la escupidera se hizo esta vez muy rápida, bajar por un canchal es muy divertido, pero a partir de ahí se nos hizo cuesta arriba, contrariamente a la inclinación del camino. Estábamos agotados de las prisas del día anterior, y de la horrorosa noche que pasamos. Tras sufrir como perros llegamos al refugio por el mismo camino, nos tomamos unos huevos fritos, jamón y nos echamos una siesta de 20 minutos. Pero de nuevo las prisas nos invadieron, Kike tenía que coger el bus hacia Zaragoza a las 20:00 desde Sabiñanigo. Con la mochila cargada bajamos a toda prisa otra vez hacia el aparcamiento de Ordesa, está claro que el reloj no nos dejaba disfrutar de este valle como merece. La idea inicial era llegar al punto de partido por la senda de los cazadores, que transcurre por encima de la faja este (Pelay) del valle hasta la altura del aparcamiento donde se baja por una pindia senda...para otra vez!!!
CONCLUSIONES:
ITINERARIO: Aparcamiento de Ordesa (1300 m.) - Cascada de Cola de Caballo (1750 m.) - Refugio de Goriz (2200m) - Ibón helado (2998 m.) - Pico Monte Perdido (3348 m.)- Vuelta por el mismo camino.
DISTANCIA HORIZONTAL: 34 km.
GANANCIA EN ALTITUD: 2000 m.
TIEMPO RECORRIDO: un día y medio (noche en refugio)
DIFICULTAD: media-alta (dificultad especialmente físicia)
OTROS DATOS: Con Kakel y Kike
FECHA DE REALIZACIÓN: 12-8-2013 y 13-8
DISTANCIA SALIDA DE LEÓN: Ruta en los Pirineos
Anda que no hace años ni nada que estuvimos nosotros por ahí. Pedazo paliza la que nos pegamos el día del Perdido, en que lo subimos del tirón desde el Puente los Navarros, más abajo del aparcamiento de Ordesa y vuelta para abajo a dormir a Torla. Una cumbre preciosa, sin duda.
ResponderEliminarUn saludo
Joder una paliza de ordago!!!.
ResponderEliminarDesde luego que Pirineos es muy especial, yo no hago más que pensar en cuando volver