Llevamos esperando este viernes ya 15 días, coincidía perfecto Luna llena, y a David y a mi nos venía bien pues nuestras mujeres estaban de cumpleaños con los niños. El tiempo parecía que acompañaba, aunque luego le pondríamos algún pero.
Pero como siempre no hay dos locos sin un tercero, llamó David a Ángel 2 horas antes de partir y se apuntó...así que a la salida de su trabajo a eso de las 20:00 estábamos en Boñar para recogerle.
Llegamos al pueblo de Horcadas y cogimos un camino que sale nada más entrar en el pueblo a la izquierda y que muere literalmente en el embalse. A las 20:45 estábamos dentro de los kayak, todo parecía ir bien, ¿que podía salir mal?...Ángel y David era la primera vez que cogían un kayak, ¿era esto tan importante?¿ estamos locos?. Las preguntas se repetían en la salida.
Al principio no les vi nada coordinados y pensé que no íbamos a llegar nunca, pues giraban más que una peonza, pero al rato se pusieron a tirar y me costaba seguirlos (dos motores tiran más que uno!!!).
Estábamos encantados, el embalse lleno la temperatura parecía perfecta, el valle de Anciles nos esperaba.
Pero fue doblar el fiordo de Horcadas y empezó a soplar un viento en contra que nos hizo muy complicado la ida, las olas nos empaparon y la temperatura bajó mucho. Después de mucho sufrimiento llegamos al fiordo de Anciles, empapados y con mucho frió,pero las vistas eran sublimes y nos vinimos arriba. Cuando tomamos tierra nos dimos cuenta de que estábamos empapados y que hacía más frió del que nos podíamos imaginar, y para colmo Ángel tenía los pies helados y se había dejado los de recambio en el coche.
Nos cambiamos la ropa, tomamos un chocolate caliente, y que mejor para quitar el frió que ponerse andar. Era ya noche cerrada pero la luna estaba espectacularmente iluminando sobre el Gilbo y el camino se veía perfectamente, de hecho no encendimos las linternas. El valle, la luna llena, el ruido del rió de cascada en cascada, ahora si todo era perfecto. Continuamos por el camino hasta el collado de Anciles y decidimos subir una peña que está al final para ver el valle de San Pedro. Tras unas rocas nos resguardamos del viento y cenamos con chorizo, salchichón y queso...¿que tendrá el embutido en la montañas que está tan bueno?.
Con la moral por las nubes retomamos el camino, y con idea de ver el embalse justo antes de llegar a los
kayaks tomamos una pista que nos llevó a una "trampa" para las cabras montesas y un baúl donde tiraban las bolsas de pienso...se nos ocurrió reutilizarlas para taparnos las piernas en la piragua, fue una idea brillante.
De nuevo montamos en los kayaks y volvimos a deshacer el camino, pero ahora el agua estaba como un plato y tuvimos mejor vuelta...hasta el final, que nos costó mas de 15 minutos encontrar donde teníamos el coche!. Estaba helado el techo, realmente se nos había ido la pinza!!!!
En conclusión una ruta espectacular, y una experiencia única. Y sobre todo muchas ganas de volver al valle de Anciles y subir alguna de sus cumbres (este verano cae alguna seguro!!!).
CONCLUSIONES:
ITINERARIO: Kayak: Horcadas(1086 m.)- Valle de Anciles (1086m.)- A pie: Collado de Anciles (1420m)- Las Traviesas (1250m)-Valle de Anciles(1086 m.)-Kayak: Horcadas (1086 m.)
DISTANCIA HORIZONTAL: 22 km.
GANANCIA EN ALTITUD: 700 m.
TIEMPO RECORRIDO: 5 horas y media
DIFICULTAD: facil,
OTROS DATOS: Ruta con David y Ángel. A la vuelta vimos muchos corzos ciervos y un rebeco a la ida.
FECHA DE REALIZACIÓN: 24-5-2013
DISTANCIA SALIDA DE LEÓN: 110km., 70 minutos
